Un año más, la iniciativa «Una carta, una ilusión» ha demostrado el poder de la colaboración y la solidaridad. Gracias al compromiso de diversas empresas y particulares, esta edición ha superado todas las expectativas, reafirmando el valor de la acción conjunta para generar un impacto positivo en la comunidad.
La campaña de Recogida de Juguetes, organizada en colaboración con la Fundación Trinijove, ha permitido apadrinar 89 regalos individuales para los niños atendidos por la entidad. A estos se suman 26 regalos destinados a los grupos del Centre Obert Neus Puig, pensados para fomentar la convivencia y el juego compartido, además de una generosa donación de libros y material escolar, que contribuirá al desarrollo educativo y personal de los beneficiarios.
Como cada año, esta campaña solidaria permite llevar la ilusión a niños y niñas cuyas familias se encuentran en situación vulnerable. Por ello, además de los regalos apadrinados, durante la iniciativa se han recogido alrededor de 130 juguetes más, que han sido donados a la entidad social Centre Sant Martí, ubicada junto al barrio de La Verneda i la Pau, para que pudieran hacer entrega a las familias que acuden semanalmente al reparto de alimentos de este centro.
Este año, la fiesta de entrega de regalos se ha adelantado al viernes 3 de enero, permitiendo que los niños pudieran tener sus obsequios antes de la festividad de Reyes (podéis consultar más imágenes e información en la web de Trinijove).
Por otra parte, B Network, una de las empresas que integran BFD, ha querido nuevamente llegar a uno de los equipamientos más próximas a la zona Fórum y ha colaborado con el Casal Infantil El Vaixell para llevar regalos que han entregado a los niños. Este casal, gestionado por Fundació Pere Tarrés, atiende a un total de 60 niños de entre 4 y 16 años de los barrios del Besós i el Maresme.
La campaña ha contado con la participación activa de diversas empresas colaboradoras, que no solo han contribuido económicamente, sino también con su tiempo y dedicación en la organización y distribución de los regalos. Desde la preparación de paquetes hasta su entrega final, cada paso ha estado marcado por la ilusión y el compromiso de todas las personas involucradas.
Esta campaña no solo refleja la responsabilidad social de las empresas participantes, sino también el impacto positivo que se logra cuando trabajamos unidos por una causa común. ¡Gracias a todos los que han hecho posible esta edición de «Una carta, una ilusión»!